Después de un viaje de alrededor de una hora, en la que incluso tuvimos que pasar el famoso túnel del Mont Blanc, llegamos a La Thuile, donde aparcamos y sacamos el forfait para un día.
Una vez en la estación nos pusimos los esquís y nos dirigimos a La Rosiere, la parte francesa de la estación, y donde estuvimos hasta la hora de comer.
Una vez comidos volvimos a la parte italiana para terminar nuestra semana esquiando las numerosas pistas negras que La Thuile contiene.
Una terminado el día pusimos punto y final a mi primera semana de esquí en los alpes con una cosa muy clara VOLVERE...
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